La empresa como sistema

La teoría actual de la empresa se fundamenta en la aportación que la
teoría de sistemas ha permitido, tanto para describir su compleja composición,
como para entender su comportamiento y facilitar sus procesos de control y
adaptación al entorno.

Esta teoría define sistema como “conjunto de elementos de cualquier
clase (conceptos, ideas, objetos, personas, etc.) cumpliéndose que cada parte
influye sobre el todo, pero no de forma aislada respecto a los demás
componentes del sistema. Además, cada posible subsistema tiene las mismas
propiedades que el sistema que lo contiene”.

La empresa es un sistema abierto; un sistema que recibe de su entorno
una serie de entradas (materiales, fondos financieros, informaciones) y que envía a su exterior otra serie de salidas de diverso tipo. Si las salidas
generadas se apartan de ciertos límites, comienza un proceso de feed-back o
retroalimentación, por el cual se modifican las entradas hasta conseguir que las
salidas se ajusten a los límites deseados. El propio sistema se adapta o
autocontrola para conseguir sus objetivos.